Citas célebres

"Desde que cogí tu libro hasta que lo dejé me desternillé de risa. Pienso leérmelo algún día." Groucho Marx.

jueves, 21 de junio de 2012

50 Sombras Más Oscuras - E. L. James

Segunda parte de este nuevo fenómeno de masas, Cincuenta Sombras Más Oscuras (se publicará el 4 de Julio en España) sigue en la línea de la novela anterior. Arregla un pequeño bache que cometía la autora antes, pero agranda mucho otros problemas de los que no habíamos visto más que la punta del iceberg.

Spoilers a partir de aquí.

El libro sigue donde 50 Sombras de Grey terminó. Ana, todavía en shock por la escenita en el cuarto rojo del dolor, se marcha y quiere olvidar a Christian. Christian, en cambio, no quiere olvidarla a ella. Y como tenían que ir a la inauguración de la exposición de José y la única forma de llegar a tiempo que tiene es dejar que Christian le lleve, Ana acepta a ir con él. Y allí, él le presenta su plan para volver a estar juntos: no habrá más BDSM a no ser que Ana quiera. Y así de rápido vuelven los dos a estar juntos y felices de nuevo.

Por un lado, me parece un giro bastante débil de la historia. La autora no nos da tiempo para "llorar la separación". Por otro lado, esta historia solo es buena cuando están los dos juntos, así que no me quejo demasiado.

Tras esto, se suceden varios problemas pequeños y de poca importancia. Van a la gala de los padres de Christian, la Señora Robinson acosa a Ana, su nuevo jefe resulta ser un acosador sexual que quiere hacerle chantaje... Y todo ello acompañado de montones de escenas de sexo. Cada dos por tres, da igual qué esté pasando, vamos a oir de Ana que no puede aguantar un solo segundo sin echarse encima Christian y que este le empotraba contra la pared de cualquier lugar. Y esto, hasta cierto punto, es bueno... pero hasta cierto punto. Y en esta segunda parte han cruzado ese punto. No, el follar tres veces al día todos los días, y aun así decir que no puedes esperar un minuto para volver a tirarte encima de él ya no es erótico, es cansino. Aprecio que la autora sepa describir las escenas sexuales tan bien, y que no tenga demasiados remilgos con el qué les hace hacer, pero hasta ella se ha debido de dar cuenta de que se pasaba con las escenas sexuales cuando muchas veces las corta y pasa directamente a la siguiente escena. Da incluso la sensación de que, como no se le ocurre alguna trama más consistente, nos intenta mantener pegados al libro con el sexo hasta que se le ocurra algo.


Por otro lado, vemos una deformación horrible en los personajes. Es verdad que Ana era un poco pesadita en el primer libro, y sigue en las mismas en este. Da igual que le diga Christian mil veces que ella le da lo que necesita, Ana sigue dándole vueltas. Y podría entender que como es insegura, le cuesta creerle; pero la forma que tiene la autora de explicar esos sentimientos y pensamientos en la cabeza de Ana no son los adecuados. En lugar de dar a entender que, aunque Christian le diga que le quiere, a ella le cuesta creerle, lo que la autora hace es que Ana actúe como si Christian no le hubiese repetido lo mismo muchas veces. 

Pero por si esto fuera poco, Christian se vuelve un controlador. No no, no un controlador como lo era en la primera parte, siempre preocupado por la seguridad de Ana y que comiese. Ahora básicamente se dedica a enfadarse porque Ana no come lo que él quiere cuando él quiere, no lleva la ropa que a él le apetece y se ve con gente que a él no le apetece. Lo siento, pero me parece inadmisible. Ahí no se puede ver preocupación o romanticismo. Eso es que este hombre tiene un serio problema, y Ana es una niña que se deja mandar por el primer chico que pasa por su vida. Sinceramente, me parece un rasgo de la personalidad asqueroso e inaceptable por cualquiera con un mínimo de amor propio o dignidad. 


Otro fallo que le encuentro es que la autora ha seguido con su manía de repetirse, pero lo ha llevado al extremo. Antes solo repetía algunos gestos de los personajes. Ahora sus gestos, pensamientos y hasta frases se repiten sin cesar. Juro que más de una vez he estado segurísima de que alguna de las frases que decían ya las había leído. Pero no me ha pasado una o dos veces, sino incontables veces. Entiendo que es una autora novel, pero para algo están los editores. ¿Nadie le ha dicho que se repite más que la berza? Además, me parece intolerable que en su primer libro escriba mejor que en el segundo. Lo único que se me ocurre es que han querido sacar los tres libros lo antes posible (en un año los tres), así que ella ha escrito de cualquier manera y a los editores les ha dado igual. 

Yo le diría a la autora que vaya a un taller de escritura. Y no se lo digo para insultarla, sino porque me parece que tiene buenas ideas, y que si aprendiese a desarrollarlas adecuadamente y aprende a escribir mejor, puede sacar libros muy, muy interesantes. 


Por otro lado, la mayoría de hilos argumentales no han estado del todo mal. Me han gustado las peleillas con la señora Robinson y con el jefe de Ana, Jack. Los primeros capítulos, cuando están en el baile de los Grey, son buenos incluso. Y los últimos, desde que Christian desaparece hasta el final, tampoco están mal.

Además, tengo ganas de ver qué pasa en el siguiente libro, porque el final promete. Si la autora sabe aclararse las ideas y aprovechar el tirón de Jack Enfurecido, puede terminar siendo una buena novela final para la trilogía.


Así que en resumen, la historia a veces es mejor o más interesante que en la primera novela, pero la calidad de esta es peor. Aun así, sigue siendo un libro adictivo, por lo que al que le haya gustado la primera parte, le recomiendo esta segunda.

miércoles, 20 de junio de 2012

Experiencia con el Kindle Touch

Kindle Touch
Llevo ya casi un año viviendo a caballo entre 2 comunidades autónomas, llendo y viniendo todas las semanas. Y como toda buena lectora, necesito mi buen número de libros al año. Pero tener que llevar/traer libros de un lugar a otro es un verdadero coñazo. No solo porque pesen, a veces mucho (¿habéis probado a llevar alguno de los libros de Canción de Hielo y Fuego en el bolso? Es un horror.), sino que además se pueden estropear. Se les doblan las hojas, las puntas se desgastan, etc. Además, me estaba quedando ya sin espacio en mi cuarto para tanto libro; tenía las estanterías llenas de libros, unos encima de otros en posiciones que me dolían hasta a mí, y aun así tenía media docena de ellos más en mi mesa. A todo esto añadirle que con mi presupuesto de estudiante comprar libros costaba esfuerzo (y dinero que no podía gastar en Zara en las rabajas).

Llevaba ya un par de años con el ojo echado a los libros digitales, y había oído muy buenas cosas de los Kindle de Amazon. Así que con eso y que un par de amigos tenían Kindles, me animé a comprarme el Kindle Touch.

Solo llevo con él una semana, pero no podría estar más contenta. Es muy fino, ligero y fácil de usar. La pantalla no tiene luz propia para que no canse la vista, así que no se puede usar a oscuras, pero no te terminan doliendo los ojos de tanto leer, lo cual sí pasa con los ordenadores. Apenas tiene botones, así que casi todo es pantalla, lo que hace que el diseño sea bonito. Puede tener hasta unos 3.000 libros y tiene la opción de archivar los libros en distintas categorías que nosotros creamos, para acceder a ellos fácilmente. Al ser Touch, casi todo se hace tocando la pantalla. Nada más encenderlo por primera vez nos sale un pequeño y muy simple manual que explica lo más sencillo para que podamos empezar a utilizarlo y descubrir todas sus funciones. Se pueden subrayar fragmentos, añadir notas, marcar páginas; guarda la última página que has leído para que cuando vuelvas a encenderlo siga en el mismo lugar, etc. Tiene diccionarios incorporados y con un solo toque en la palabra, te aparece en una ventanita la definición de la palabra. Vamos, que es una maravilla.

Los tres tipos de Kindle


Amazon también vende el Kindle anterior, más sencillo, por 99€. El Kindle Touch normal vale 129€ y el que lleva 3G incorporado cuesta 189€. Yo tengo el Touch normal, que tiene WiFi, y la verdad es que hasta ahora estoy feliz. Sigo aprendiendo a usar todas sus funcionas, pero hasta ahora no tengo queja. El único contra que le veo es que solo lee el formato .mobi, pero nos podemos descargar el programa Calibre que convierte archivos a cualquier formato en solo un momento.

Otro de los ebooks que barajé comprar fue el eReader de Sony. Es ligeramente más fino que el Kindle Touch, pero la verdad es que por bastante poquito. Tienen el mismo tipo de tinta electrónica, misma resolución y escala de grises, tienen WiFi... Las diferencias más importantes me parecen que el eReader parece que tiene una batería que dura más, y que mientras que el Kindle tiene unos 3GB disponibles para libros el eReader tiene 1,4GB. Pero el eReader me habría costado 159€, mientras que el Kindle Touch solo 129€. Y yo creo que eso fue lo decisivo para mí.

El Sony eReader PRS-T1
Si alguien está interesado en comparar los 2 aparatos de forma más exhaustiva, aquí están el Sony eReader PRS-T1 y aquí el Kindle Touch.

Mi mayor problema con los ebooks no tiene que ver con los aparatos en sí, sino con los libros digitales. Me explico.

Uno pensaría que, al no tener que hacer un libro físico, preocuparse por el número de libros que producir en cada tirada para que no se queden con montones de ellos sin vender y todo tipo de problemas que seguramente acarrea el publicar libros de forma física, los precios de los ebook serían menores. Bastante menores. Y sí, cuestan menos... pero la diferencia no es tan grande. Lo que no es normal es que un libro en tapa blanda me cueste 15 euros y su versión Kindle 12. Que haya que rebuscar tanto para encontrar ebooks por menos de 10 euros, cuando por ese dinero voy a la librería y me compro libros de bolsillo. Me parece una vergüenza. Está claro que gratis no van a ser, ni van a costar 2 euros. Pero entre que por lo que oigo a los traductores literarios les pagan de poco a menos y los autores tampoco es que se hagan de oro, ahí hay mucho dinero que va para la editorial por cada libro. Y quizá, si fuesen menos avariciosos y sacasen más libros en versión ebook, no se piratearían tantos. Porque a todos nos gusta leer un libro bien editado y con una traducción profesional. Pero si me van a clavar 10 eurazos para una cutre edición y una traducción deficiente, pues casi que me lo descargo gratis, me descargo la versión de algún fansub o incluso la versión original (si es una traducción).



Espero de verdad que todo esto mejore ahora que se ve cada vez más gente con libros digitales. Porque sería una pena que se montase el mismo circo con los libros que se ha montado con las películas y música.

domingo, 17 de junio de 2012

50 Sombras de Grey - E. L. James

La primera parte de la nueva trilogía que está volviendo loca a la gente es 50 Sombras de Grey. Es una novela romántica con ciertos toques de BDSM, y muy, MUY adictiva. Empezó como un fanfic de Crepúsculo y pronto se convirtió en una novela que no tiene nada que ver con la saga mencionada.

Puedo entender por qué está causando furor esta novela. Es fácil de leer y la trama te absorbe. Además, el BDSM aparece poco (aunque lo nombran mucho) y empezamos a adentrarnos en ese mundo muy poquito a poco, así que en realidad no hace falta saber nada sobre ello y al lector no le chocan las escenas porque nos presentan estas prácticas de manera muy suave, y cada vez aumenta un poco la intensidad, dejándonos tiempo para acostumbrarnos a ello.

Aun así, no es oro todo lo que reluce, y 50 Sombras de Grey tiene más de un fallo que hace que no sea totalmente genial.

Spoilers a partir de aquí.

A primera vista, Anastasia es una chica corriente y es fácil sentirse identificada con ella. De belleza normal, nada del otro mundo; estudia una carrera normalita (Literatura Inglesa); comparte piso con su amiga de facultad, etc. Y su primer encuentro con Christian es entreñable, con él siendo un témpano de hielo y ella pifiándola una y otra vez. Pero aun así, vemos que salta una chispa entre ellos.


De todas formas, hasta que Ana no se emborracha en el bar la cosa va bastante lenta. Pero una vez que pasa la noche con Christian, todo empieza a coger velocidad. Y cuando descubre el cuarto rojo del dolor, se pone por fin interesante. Tengo que admitir que me pareció extraña la ignorancia total sobre el BDSM de Ana. Entiendo que no todo el mundo conozca unas cuantas prácticas del sadomaso, pero no saber nada de ello me parece difícil de creer.

Al tener la primera conversación sobre el contrato, ahí empieza lo mejor, ahí empieza la historia de verdad. Es en ese momento en el que vemos que Christian es humano. En ese momento empieza la relación entre los dos de verdad. Esos capítulos son, probablemente, los mejores de todo el libro.

Después se llena de altibajos. La mayoría de momentos entre Ana y Christian son muy bonitos, da igual si son de sexo o discusiones. Los emails me encanta, son graciosísimos. Pero cuando está con Kate el ritmo baja bastante y la historia digamos que "se atasca", y pasa lo mismo cuando está con su madre.


El final, en cambio, me ha gustado mucho. Los últimos dos o tres capítulos no podía apartarme del libro. Veía que se terminaba y no sabía qué iba a pasar, cómo iba a pasar. La escena en el cuarto rojo del dolor es muy buena, y la llorera de Ana y la carita de abandono de Christian me han dejado tocada. Es un final muy emotivo y realista, acorde con la personalidad de los personajes. Y aunque será difícil de volver a juntarles en el siguiente libro y sufriré sin Christian durante un tiempo, creo que la autora ha hecho lo correcto.

Me ha gustado que la narración no es muy pesada y se lee fácilmente. A veces incluso diría que es "muy ligera", y es verdad que no es de grandísima calidad, pero tampoco me parece malo. Aun así, las escenas de sexo me parecen muy buenas. Están bien escritas, son originales, no se repiten y son explícitas. Además, no se anda con remilgos, y eso no es algo que se vea en muchas novelas. Nos da el número justo de escenas de sexo, y hace que la tensión sexual crezca poco a poco. Así, no sentí la necesidad de pasar las páginas para llegar a la siguente escena erótica, como pasa en algunos libros; ni tampoco sentí que el argumento se quedase de lado para añadir sexo sin parar, como sí sentí en El Rapto de la Bella Durmiente.

También me parece que Christian es un gran personaje. A veces tiene esos cambios de humor que no me creo que le hagan mucho bien y puede parecer demasiado obsesivo, pero en general tiene el toque justo de serio, romántico, sexy y necesitado de amor. Y una de las cosas que más me hacía seguir leyendo era saber más sobre su vida: qué le pasó de niño, por qué se siente tan incómodo en su familia, qué pasó con la señora Robinson...

Pero no ha sido todo perfecto. He leído en alguna parte que 50 Sombras de Grey es una especie de Crepúsculo adulto, y aunque no estoy de acuerdo y me parece totalmente exagerado, sí que se pueden encontrar un par de paralelismos entre las dos obras que denotan que la autora estuvo influenciada por Stephenie Meyer.

Por un lado, Anastasia puede llegar a cansar. En general me cae bien y me parece soportable, pero se puede poner muy pesadita. Tenemos como ejemplo el hecho de que sea incapaz de que la inviten o regalen nada. Un poco de reticencia está bien, pero montar esos numeritos porque te novio te ha comprado unos libros que te encantan llega a ser patético. Además, le da muchas vueltas a todo y parece sorda: da igual cuantas veces le repita algo Christian (que le va a echar de menos, que le quiere), ella va a olvidarlo a los 2 segundos y a pasarse 1 capítulo dándole vueltos a si Christian le va a echar de menos o le quiere.

Además, la autora ha calcado esa manía de Meyer de hacer que los personajes repitan una acción hasta la saciedad. No hace más que repetir que Christian se pasa la mano por el pelo y ladea la cabeza, mientras que Ana se muerde el labio y todo el mundo pone los ojos en blanco. Si hubiese dejado que Christian se pasase la mano de vez en cuando por el pelo y Ana se mordiera el labio a veces, habría sido peculiar y gracioso. Así, es un coñazo. No es tan horrible como Bella Swan ni tan pesada como Sookie Stackhouse, pero podría mejorar notablemente.


También sentí, sobre todo hacia la mitad del libro, que la historia no tenía rumbo fijo, que la autora se estaba llendo por las ramas y lo que nos contaba no era demasiado relevante. Excepto cuando están los dos protagonistas juntos, no parece que haya un verdadero avance, y eso es bastante confuso y me corta el rollo.

En resumen, me parece una novela más que recomendable. Es fácil de leer, tiene una historia interesante y es una buena mezcla entre romanticismo y erotismo. Pero si alguien quiere una novela de gran calidad o leer algo con gran contenido en BDSM, este no es el libro indicado.

domingo, 10 de junio de 2012

Ciudad de Hueso (Cazadores de Sombras 1) - Cassandra Clare

Primera parte de la serie Cazadores de Sombras, de Cassandra Clare. Tenía el libro desde hace unos 3 años, cuando lo compré porque oí muy buenas críticas de él. Hace 3 días me decidí a empezarlo, y aunque en general me parece muy bueno y voy a continuar con él, en cierto modo me ha decepcionado y me siento defraudada.

La historia está situada en Nueva York, lo cual me encantó. La fantasía, si urbana, es mejor fantasía. Puebluchos lluviosos no, gracias. Se empieza a ver por dónde va a ir la historia desde el segundo capítulo, momento en el que me enganchó. Nos presentan un mundo con nefilims, pero no como los de Hush Hush. Estos son cazadores de sombras, es decir, cazadores de demonios. Y es que en el mundo hay mundanos (humanos "normales"), cazadores de sombras, demonios (los malos malotes) y subterráneos (medio demonios que, si no hacen nada malo les dejan a su aire). Clary, la protagonista, de repente es capaz de ver parte de ese mundo, aunque no debería. Y así conoce a Jace, un cazador de sombras y "chico malote sexy" del libro.

Spoilers a partir de aquí.

Al principio todo va bien. No soy muy fan de Isabella desde el principio, pero esa vena de "zorroputa" que tiene me parece que puede ser buena para futuras tramas. Alec sí que me parece un personaje interesante. Simon es gracioso, aunque un poco aburrido. Y la verdad es que me dejó un poco mosca que Hodge fuese tan "mentor perfecto, hiper amable y maravilloso", pero tampoco estaba mal. Y cuando la trama avanza, todo se pone mejor. La verdad es que Valentine me importaba más bien poco y me gustaba más leer las "Aventuras de unos Cazadores de Sombras Adolescentes en Manhattan", como cuando van a la fiesta, o las peleas que tienen entre ellos. Pero entiendo que también tiene que haber una trama más grande e importante detrás.

El problema viene poco después de salir de la guarida de los vampiros. Empezamos a ver la relación entre Jace y Clary, y la verdad es que como pareja me encantan. Por fin Simon le declara su amor a Clary (creo que era obvio desde la primera página, pero hagamos como que no). Vamos, que nos preparan para el futuro cruze de sentimientos.

Y en esto, les da un ataque de imprudencia adolescente y van a por la Copa ellos mismos. La pelea bien, la vuelta al Instituto bien. Hodge les traiciona, me pongo a gritar "¡Lo sabía!¡Lo sabía!" y Valentine aparece llevándose a Jace. Aquí empiezo a flipar un poco, porque no hay forma de entender por qué se lo lleva. Clary se encuentra con Luke, bien. Le cuenta la historia del Levantamiento y no está mal, aunque no me termina de convencer el rollo entre Valentine y Jocelyn. Clary es la hija de Valentine. No voy a negarlo, me esperaba algo parecido. Me digo que puede ser un buen toque de dramatismo en el futuro, un "tengo que matar a mi padre". Vale, venga, lo damos como bueno.


Pero ahora viene lo malo. Llegan al hospital y Clary se encuentra con Valentine... y con Jace. Porque resulta que Jace es hijo de Valentine y Jocelyn, es decir... hermano de Clary. Asco. Horror. ¿Por qué?

Me parece que esa sola decisión empeoró el libro mucho de un solo golpe. Por un lado, está increíblemente visto. Hermanos separados, Yo soy tu padre, etc. Por otro, la relación entre Clary y Jace, esa tensión entre los dos, era lo mejor del libro, y ahora había borrado cualquier posibilidad de ello de un plumazo. Además me siento engañada porque precisamente eso vendían durante todo el libro, Clary  Jace. No me hizo ninguna gracia, la verdad.


Además, todo ese embrollo con Valentine, Jace y Clary en la habitación, gritándose los unos a los otros y diciendo que si esto es verdad, eso mentira, me pareció ridículo. Valentine parece un debilucho si un hombre lobo medio muerto o su hijo casi pueden matarle. Además, el cambio de actitud de Jace no es normal. Entiendo lo de estar feliz o emocionado por volver a ver a su padre. Lo que no entiendo es cómo un momento está portándose como un perrito faldero y agarrando a Clary, al siguiente a punto de llorar y seguido casi mata a su padre. No tiene ningún sentido.

El final también es malillo. Jocelyn sigue viva, lo cual me parece un error. En este libro no matan a nadie, así que dramatismo cero. Unas muertes siempre le dan emoción a una novela, y aquí no solo no han matado sino que han "revivido" a gente. Asombroso. Y por si fuera poco, al volver al Instituto resulta que Isabella es una especie de osita amorosa y quiere ser Best Friend Forever de Clary. Y Alec también es ahora el chico más majo del mundo mundial. Por Dios, ¿se puede ser más empalagoso? ¿No va a haber peleas, va a ser todo rosa, de algodón de azúcar y purpurina?

Y eso sin contar que la parte "romántica" del libro ha desaparecido. Vale, que estoy segura que en el futuro harán que Simon y Clary salgan juntos, pero no me parece lo mismo. Es tan sencillo, tan "amigos de la infancia superan las adversidades del destino y viven juntos felices para siempre" que me entran ganas de vomitar. Prefería a Jace, mil veces más. Pero a no ser que la autora se saque otra ida de cabeza y diga que no, que era bromita, que no son hermanos (lo cual dudo que pase), no hay nada que hacer.

Así que en general lo apruebo y me leeré el siguiente libro, pero hacia la página 450 le habría dado un 8 de 10, y tras leer el despropósito de final, le doy un 6, y va contento.

P.D.: he leído que van a hacer una película y han escogido a Jamie Campbell-Bower como Jace. Menuda metedura de pata.